Saturday, August 31, 2019

Tus horas con las mías (Soneto)






Tus horas con las mías
(Soneto)




Los días que amanecen en tu andanza

me entregan tu vivir en tal manera;

rastro y fieldad guardando la lumbrera

de las rutas que han dado la habitanza.


Horas: lugar del flujo y la folganza

de ambos con la fusión de nuestra hoguera,

que envuelta con la brisa reverbera

la combustión carnal de la semblanza


en una misma esencia hacia el destino.

El que nos da las formas del presente

con luminosa entrega de fricciones.


Todas, trazando el viaje del matino

en los rumbos asuetos del ambiente

que te adhiere a la luz de mis rincones.




Nancy Santiago Toro
Derechos Reservados©






Monday, August 19, 2019

El buitre (Soneto)





El buitre
(Soneto)




El buitre que conozco como humano,

circundando rapaz es guarrería,

mostrando a plenitud la notomía

putrefacta en los gajes del villano.


En altitud procura ser yusano

al servirse la muerte y su fasquía.

Satisfacción del acto en roñería,

desde el capricho del placer mundano,


negreciendo la fama procedente

de la escoria que asoma el animal.

Con porte de mediocre no es rareza


que hacia adelante sea el maloliente,

visible miasma y la aversión carnal,

por ser del bajo mundo su destreza.



Nancy Santiago Toro
Derechos Reservados©






Thursday, August 15, 2019

Ceguera (Soneto)






Ceguera
(Soneto)




Como el ciego abrigando la distancia

coleccionas quimeras polvorientas

de las huellas mentales que frecuentas

con la ansiedad carnal en la hidromancia.


Cabeza y necedad en vigilancia

citando a borbotones las tormentas

de inútiles penumbras que revientas

tras la fricción de un viento sin sustancia


y sin ruido en la carne, donde habito,

ociosa de yoidad en mi jornada.

Si en lejanía voy en el presente

 

moldeando la vida que transito.

¿Ya ve usted la ceguera en su mirada?

Buscando sin hallar, jamás, lo ausente.





Nancy Santiago Toro
Derechos Reservados©






Monday, August 5, 2019

Una postal a tu querida nostalgia






Una postal a tu
querida nostalgia
(Dedicado a Mariayeres con cariño)





Con boca de abismo saciado de aire

transita las penumbras del cigarro

y alzando el pecho amamanta

las vidas de todas sus nostalgias.

Toxicómana criatura a merced del humo

interpretando la figura del túnel

cuando quiere las vitrinas del recuerdo

en el puntual instante que dirige, con vocación

de director entre sus manos, toda

la humareda de los perfiles abstractos

con vuelo hacia las nubes.

El hueco lugar de sus consentidas ausencias.


Su primer verbo es- fumar- se para ser

fiel constructora de neblinas saturadas

de exhalaciones soledosas

en quemadura de segundos,

tan viciadas en la sangre del dolor

hacia cualquier final herido,

que se nutre con las torturas de la memoria

por el largo consuelo hacia el olvido.


Yo la ubico en la pedrosa costana de la pena,

otra vez con su rastra de espejismos,

sin detenerse en el programado viaje

que lleva al conclusivo rincón del detrimento.

La veo, sin duda, dadivosa de cenizas

al soltar los rostros incorpóreos

como colillas de fumadas ilusiones;

fotografías intocables del corazón

comprometidas al yugo de la tristeza,

por que es líquido su ayer

y amargo el resabio

de invocar encuentros

en las brasas de otros nombres.

La única excusa disponible

para rodar de espaldas por las deprimidas venas

que la humedecen, continuamente, de pasado.


Puede que algún día vuelva al presente

con los esplendores del estreno,

exiliada de cuerpos eventuales

y se descubra, totalmente, a salvo

dentro de las hondas cicatrices

que en marcada transición de inacabadas

aberturas, sin tocar la tierra,

germinan contra el viento y la marea,

los internos ciclos del vivir.

Esos, que aún más adictos de futuros

siguen delineando el debut de otros caminos.




Nancy Santiago Toro
Derechos Reservados©