Saturday, July 7, 2018

Tu olvido






Tu olvido




Tu olvido vaga por la brisa,
mi alma en osadía lo ha buscado
por las sendas abiertas de la vida
sin brújulas, sin timón, sin calendarios,
solo con la esperanza en carne viva
y un plan absurdo de encontrarlo.
Sobre lecho de pétalos y entre espinas,
donde las gotas de rocío son de llanto,
entre escombros de tristezas mezquinas
que aún revelan la fuerza del pasado
o sobre el páramo que detiene la semilla
y muestra el polvo arrinconado de los años,
sin atinar con su paradero todavía
en frágil aventura, he fracasado.
Lo busqué en el rumbo del silencio,
donde todo mi mundo gira y calla
y me llevo al inevitable fondo negro
de ese vacío abierto en la distancia,
y allí volví a ver tu nombre ínclito
repitiendo cada letra en la mirada.
Hasta llegué sin querer al firmamento
y entre un oleaje de estrellas blancas
surgió tu imagen en cada destello,
y cada destello rodó en mis lágrimas.
Mi afán absurdo en final intento
me llevó a las orillas de la nada,
allí colgaban todos tus recuerdos
con sentimientos fuertes de añoranza
y un profundo dolor en desespero
arrojó la cruda verdad en mi cara
al dejarme saber que tu olvido
en compañía del tiempo marcha.


Nancy Santiago Toro
Derechos Reservados©



Para el amor eterno






Para el amor eterno





Al verter sobre ti mi cántaro de años,

al sumergir tu vida en la corriente de mi tiempo

se fueron uniendo dos pasados de futuros extraños

y hoy vamos flotando juntos con un solo cuerpo.


En perenne movimiento nuestro rumbo avanza

las inexploradas distancias de los mares abiertos.

Tu mano en mi mano es como el ancla que alcanza

los deseos vírgenes que se vuelven expertos.


Entre crudas tormentas, entre pruebas y llanto

asoma el desafío con su dentadura de miedo,

pero al abrir su boca succiona su espanto

al no poder enfrentar nuestro caudal de denuedo.


Sobre la impetuosa marea que estalla en la roca

o sobre la ola que sensualmente desliza su beso, 

nuestro cuerpo en el mismo puerto desemboca

con el más enfático amor que hoy les profeso.


Así navegamos las noches, los días, las horas,

 lo claro, lo oscuro, lo profundo, lo externo;

testigo es la luna y las ardientes auroras

que vamos haciendo el camino en lo eterno.



Nancy Santiago Toro
Derechos Reservados©





Colgado del cielo de mi alma






Colgado del cielo de mi alma




Con movimiento de nubes van mis pensamientos,

recreando tu silueta con bordes de ternura,

te elaboro en fantasías, te dibujo en los recuerdos,

bajo el flamante sol o bajo la fría luna.


Te sumerges en las memorias de mi cuerpo,

te revelas translúcido, casi rozando la mirada.

En mi espacio eres todo ese latir sangriento;

pulso de vida, vital parte que no se arranca.


Pero que delicia es tenerte en mis adentros,

saturando de pasión ardiente mis entrañas,

electrizando con intensidad mis sentimientos

en cada toque estremecido de nostalgia.


No voy sola, vas conmigo todo el tiempo.

Somos uno solo, no existen las distancias,

eres la imagen viva, la presencia que retengo

colgada, fijamente, en el cielo de mi alma.




Nancy Santiago Toro

Derechos Reservados©







Siempre (Dueto)






Siempre

Por Nemesis y Nancy Santiago Toro





Siempre habrá un inmortal recuerdo entre los dos
que adhiera la temible distancia a algún momento,
que invierta el suplicio ensangrentado del corazón
con el gozo que dejamos en las huellas del tiempo.
 

Sobre la llegada y partida de una vida sin adiós,
de tu cielo, mar azul y de tu noble sentimiento,
en versos y poesías encontradas en blasón,
entre música, caricias y besos de vibrante tempo.
 

Siempre habrá un diálogo en silencio, tibio como el sol
que se escuche en la intimidad recóndita de mis dedos,
porque ellos dijeron al desnudo lo que ocultó la voz
y lo que no dijo el orgulloso corazón, por miedo.
 

Y habrá una herida que no sanará ni con alcohol,
que se abrace a tu falda y replique muchos credos,
porque mis dedos ocultaron al cielo lo que sentí por vos,
aunque lo sintiera mi soñar y mi corazón con denuedo.
 

Siempre habrá una presencia íntima de nuestro amor
con el matiz que va dejando el otoño con el invierno;
las brisas gélidas murmurarán al oído olvidos con temor,
mas mi alma impregnará con tu vivido calor todo mi cuerpo.


Y habrán luces de esperanza con caricias y sin dolor,
con las sensaciones del verano de este amor eterno;
mis volcanes en furia reclamarán a tus ojos por tu pudor
al recorrer con su lava de deseo el infinito tiempo.


Nancy Santiago Toro
Derechos Reservados©